miércoles, 19 de noviembre de 2014

Imprevisible, casual, inesperado.

Es curioso el ritmo con que pasa y lo imprevisible que es la vida. Un día te apetece salir de casa, dar una vuelta. Es un día lluvioso. Vas caminando por la calle, despistado, mirando a la nada, pesando en tus cosas y de repente, (pero sin tu saberlo) se cruza en tu camino una persona que mas adelante lograra tener una relevancia trascendental en tu vida. Pasamos de largo, porque para nosotros es otra persona mas que vemos. Al pasar el tiempo, días, semanas, meses, años... (El tiempo que sea necesario y oportuno, después de todo, nosotros no movemos los hilos del destino, al menos no todos) nos volvemos a cruzar con esa persona, (suena todo muy utópico, poco probable y todo lo que queráis, pero no es la primera vez que me cruzo con alguien por ahí, es una persona como otra cualquiera que veo y al final sin saber como, así es el destino, acabo conociéndola)  y la conocemos, normalmente porque nos la presenta un alguien (entiéndase amigo o familiar). Bueno, al principio todo es normal, habláis y habláis, acabáis de conoceros, tendréis desde vuestra edad actual hacia atrás para contar de recuerdos, anécdotas, etc. Vaya, parece que es una persona que nos cae bien, es buena, simpática, algo seria quizás (es porque aun no hay confianza, tranquilos) (o porque realmente es así jajajajaja) os podéis pegar hasta tarde hablando, hasta el punto que a ninguno le importa tener ojeras al día siguiente porque valdrá la pena el sueño perdido, sabremos que ha valido más cada palabra, cada frase, cada gracia, cada sonrisa, todo, de repente es mas importante en ese momento con esa persona. Día si y semana no, habláis, o cada día, ya eso es independiente de cada caso, y bueno lo que en un principio no era nada, poco a poco se va convirtiendo en algo cada vez mas grande sin darnos cuenta. He de decir que estas son las mejores sorpresas, aquellas en las que nunca esperas que algo así suceda o suceda de ese modo y finalmente te llevas esa alegría. No podría explicar con palabras como es esa sensación, me limitare a decir que es maravillosa. Como íbamos diciendo, ese algo se va convirtiendo en algo mas y mas grande, algo importante, una relación (no hablo de amor, aun no) estrecha entre esas dos personas que un día se cruzaron en la calle y se miraron sin saber que todo iba a ir así, que al final se iban a conocer e iban a llevarse tan bien. A partir de aquí, hablare desde dos perspectivas que se entenderán perfectamente.
Han pasado varios meses, ya os conocéis mejor, quedáis de vez en cuando, os lo pasáis bien juntos, os convertís en personas importantes el uno para el otro, personas de mutua confianza, PERO, no va a mas. Uno o ninguno desea comenzar algo mas allá de una amistad, que por otro lado es una gran amistad, no hay nada como una buena amistad, con una persona en la que tienes este trato, esta relación.
Han pasado varios meses, ya os conocéis mejor, quedáis de vez en cuando, os lo pasáis bien juntos, os convertís en personas importantes el uno para el otro, personas de mutua confianza, y para que engañaros, os gustáis, os atraéis, o como queráis camuflarlo, pero ahí hay un amor que no tenéis con otra persona. Un amor único, que solo sentís con esa persona y del que no me detendré a hablar porque mas abajo hay una entrada que habla del amor y bueno, no quiero repetir siempre lo mismo. Pero lo que quiero decir con todo esto es que a veces, la persona mas inesperada puede cambiarnos la vida, simplemente llega sin hacer mucho ruido, tímidamente, y poco a poco va abriéndose paso hacia nosotros, despacito, con pequeños pasos que abren grandes caminos. Podéis estar en la playa, en la calle, en Madrid, en Gran Canaria, en Nueva York, en Alemania, da igual el lugar, da igual el tiempo, el destino hará que se crucen en nuestro camino personas así, inesperadas pero importantes.

Y yo doy mi opinión así porque hablo desde mi propia experiencia, un día, de casualidad, conocí a una chica, una chica que en ese momento pues era poco relevante para mi y yo para ella. Pero nos fuimos conociendo, hablábamos de lustro a lustro jajajajajajaa (como se que leerás esto, es broma enana) y poco a poco se fue haciendo mas y mas importante para mi y en mi vida. Ella y yo no eramos nada y sin embargo acabamos siéndolo todo. Te dedico la entrada pequeña. Sin ti, muchas cosas no serian lo mismo, y me alegra y quiero que todo siga siendo como deba ser, pero contigo, no quiero a nadie mas, no quiero vivir nada con alguien que no seas tu. Te amo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario